Cuando hablamos de la higiene de nuestra cama, saber cada cuánto hay que cambiar las sábanas es uno de los pilares más importantes. Y es que las sábanas tienen, entre otras funciones, permiten los flujos de aire para ayudar a regular nuestra temperatura corporal.
Cuando las sábanas están sucias se acumulan células muertas de la piel, sudor y un largo etcétera. Esto es posible que haga aprecer los ácaros, pequeños artrópodos que pueden causar molestias y erupciones en la piel.
En este artículo, descubrirás qué efectos tienen en tu salud, no cambiar las sábanas regularmente, la importancia de la higiene en la ropa de cama y mucho más.
Cambiar sabanas por higiene
El hecho de cambiar las sábanas puede parecernos de lo más normal del mundo. Sin embargo, no lo es para las personas. ¿Sabías que el 30% de los británicos
solo cambia las sábanas una vez al año?
La falta de higiene con la ropa de cama puede tener diferentes implicaciones negativas para tu salud. Piel irritada, reacciones alérgicas al despertar… ¡Incluso tener la nariz taponada constantemente!
Si además tenemos en cuenta que pasamos una media de 8 horas (o ⅓ de nuestro día) en la cama, esto debería preocuparnos más todavía.
Sabana de cama: Los ácaros
Los ácaros, como tal, son diminutos insectos que viven en el polvo de los hogares. En ciertos casos, los seres humanos desarrollamos alergias ante estos artrópodos. Algunos de los síntomas son estornudos, goteo de la nariz, ojos llorosos, congestión nasal, picor en la nariz…
Para evitar tener ácaros, además de cambiar las sábanas, podemos tener otras cosas en cuenta. Todas sumarán higiene a nuestra cama y, por ende, a nuestra vida.
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- Ventilar el dormitorio: Los cambios bruscos de temperatura y humedad hace que los ácaros no se sientan a gusto.
- Renovar el colchón: Si llevas 10 o más años con el mismo, deberías renovar el colchón por uno nuevo.
- Colocar una funda protectora: También es importante lavarla con frecuencia.
- Comprar sábanas antiácaros: No son estrictamente repelentes a estos artrópodos, pero sus tejidos son más resistentes. Asimismo, también existen colchones antiácaros.
- Aspirar el colchón de vez en cuando. Limpiar el colchón es igual de importante, por motivos obvios. El contacto entre la ropa de cama puede hacer que, aunque tengamos unas sábanas limpias, la suciedad se transmita a ellas si el colchón no lo está.
Los ácaros pueden encontrarse en las plantas y en nuestra propia piel. Sin embargo, estos insectos de la familia de las arañas tienen cierta predilección por los tejidos.
Los casos de salud más graves relacionados con los ácaros pueden derivar en enfermedades como dermatitis, sarna e infecciones. Por ello, cambiar las sábanas y mantenerlas limpias es un modo sencillo de prevenir este tipo de complicaciones.
Cada cuanto cambiar las sabanas
Entonces, para la pregunta de oro… ¿Cada cuanto cambiar las sabanas? La experta en sueño Lindsay Browning recomienda cambiarlas una vez a la semana. Como mucho, deberíamos esperar hasta dos semanas para llevar nuestra ropa de cama a la lavadora y sustituirla por una nueva.
Si bien en verano debemos tener más cuidado con la higiene de la cama, pues por el calor sudamos más, no hay que descuidarla en invierno. Y es que entre los encuestados por la Dra. Browning, casi un 70% afirmó que se le olvidaba cambiar las sabanas cada semana.
Así que si prestas atención al mantenimiento de las sábanas, mejorarás no solo la higiene, sino también la salud de quienes duerman en ella.
Cada cuanto comprar sabanas nuevas
Aunque mantengamos las sábanas limpias y en buen estado, es un elemento del hogar que debemos cambiar periódicamente. Es una cuestión que va más allá de lo meramente estético, sino que trasciende al plano de la salud.
Es recomendable cambiar, al menos, cada cinco años de sábanas para mantener sus propiedades higiénicas, estéticas y funcionales.
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