Con la llegada de nuestro bebé intentamos cubrir todas sus necesidades de la mejor manera posible, y una de las cosas más importantes y que tienen gran repercusión en su crecimiento es su descanso. A continuación presentamos las claves para saber qué colchón es mejor para bebés y qué debemos tener en cuenta cuando vayamos a comprarlo.
¿Cómo es un colchón adecuado para bebés?
Lo primero que hay que saber es que los bebés suelen dormir en cuna hasta los 2-3 años, siendo los más importantes en su crecimiento y desarrollo. Por eso, hay que elegir el mejor colchón para bebés, que garantice su descanso y crecimiento óptimo. Uno de los principales problemas, es que el bebé no podrá darte su opinión acerca de si descansa bien o mal, por lo tanto, es muy importante informarse bien sobre cuál es el mejor colchón de cuna para bebés, en estos primero años de su vida.
De hecho, hay características sobre el colchón para bebés recién nacidos y sus posteriores años que son reguladas por ley. Por ejemplo, existen algunas medidas (estándar: 120×60 ó 140×70)suelen ser los más habituales , así como características anti-asfixia que forman parte de dicha norma. El colchón recomendado para bebés deberá tener un grosor de entre 12 y 15 centímetros, que es suficiente para soportar el peso del bebé y no demasiado alto para evitar que pueda salirse de la cuna. Además, el espacio entre el colchón y la cuna no puede ser superior a los 4 centímetros.
Características de un colchón para bebés
A parte de lo mencionado sobre el colchón adecuado para bebés, hay características que también tienen que ser comunes para estos tipos de colchón. Nuestra recomendación es que deben de ser firmes, planos, presentar un cubre colchón impermeable para bebés, y ser transpirable. Esto nos asegura disponer de las mejores condiciones en su descanso e higiene cada noche.
Comprar un colchón nuevo
Algo que también es muy recomendable es que el colchón sea nuevo, ya que si es de segunda mano (de familiares, amigos…) habrán perdido las características inherentes al propio colchón por el paso del tiempo y además no podremos controlar las condiciones higiénicas del mismo. Sin duda es una buena opción optar por un colchón hipoalergénico y con protección anti-ácaros y anti-bacterias.
Tras estas recomendaciones básicas que tienen que tener todos los colchones para bebés, podemos encontrarnos con productos especiales, como un colchón antireflujo para bebés. Pero estos últimos mantendrán las características básicas recomendadas para el buen descanso de los más pequeños de la familia.
¿Cuándo usar una almohada para bebé?
Debemos plantearnos usar una almohada para niños cuando sus hombros sean más anchos que su cabeza, normalmente entre los dos y cuatro años. En este caso, debemos proporcionar un apoyo para dormir que les ayude a mantener una correcta alineación de la espalda y el cuello. Esto significa que la almohada para bebés no será necesaria. En caso de existir riesgo de plagiocefalia, su uso debe estar prescrito siempre por un pediatra. El mejor apoyo para la cabeza del bebé al dormir será un buen colchón.
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